lunes, 21 de noviembre de 2016
jueves, 3 de noviembre de 2016
El origen y la evolución del
español
1. Introducción
El idioma Español, también llamado Castellano, igual que el Portugués, Catalán, Gallego y Provenzal, Frances, Italiano y Retorromano, se originan a partir de la transformación del Latín. Las diferentes lenguas nativas que se hablaban en la península Ibérica, antes de la prolongada dominación romana; a excepción del Vascuence, desaparecieron dejando solo algunos vestigios aislados y voces toponímicas. Para entonces un latín vulgar con características dialectales, remplazó lo que al postre existía en la provincia romana de Hispania.
En el S XI las que prueban sus características típicas castellanas naturales de la típica Castilla la Vieja al sur de la antigua Cantabria. La nueva Lengua para entonces evoluciona según el sino de una misión imperial a partir del momento en que Castilla se eleva a Reino Poderoso y se consolida como la bandera de la Unidad Hispánica.
Elementos básicos en el desarrollo idiomático hacia los Siglos IX y X, fueron los Glosarios (Emilianense y Silense), tipos de diccionarios latinos primitivos donde al lado de las palabras latinas se escribían las Romances correspondientes. En el siglo XI el idioma ya expresaba claramente la Épica de los Cantares de Gesta y con esto se destacaba el primer ícono de la Literatura española: El Cantar del Mio Cid, obra concluida finalmente hacia el S XII. Hacia el S XIII se incorporan expresiones de otras lenguas, se aplica como instrumento en la expresión científica-histórica y se da un gran paso al fijar la Prosa Castellana. La Gran influencia de la Francia y su protagonismo, generan la obligada inclusión de Galicismos dentro del léxico. La incorporación de expresiones populares, y las variantes de cultismo poético, así como los neologismos a partir del latín o el griego; enriquecieron notoriamente la lengua española.
Al Final del S. XV y todo S. XVI surge el período llamado de Grado máximo de Universalidad del idioma, pues en el reinado de los llamados Reyes Católicos, España se unifica como estado y exporta su Lengua Castellana América. El Filólogo Nebrija en 1492 publica la Gramática Castellana dando un destacado impulso al español uniéndolo entonces al latín renacentista. Al amanecer del S.XVII (1605), don Miguel de Cervantes Saavedra, con la obra máxima de la Prosa española: El Quijote de la Mancha, dará muestra del ejemplo vivo y
armónico del refranero popular y de la elegancia renacentista heredada de uno de los mejores momentos del desarrollo artístico y cultural. Quevedo con su Conceptismo y Góngora con su Culteranismo hacen gala de la riqueza del lenguaje barroco. En Los Siglos XVI y XVII, el español se consolida, define sus rasgos básicos y se modifica y acomoda la Fonética.
Hacia 1771, Siglo XVIII, La Real Academia de la Lengua publica su Diccionario de Autoridades, obra que reglamenta la Ortografía, la Redacción y las normas de Gramática
Características comunes del español americano El español americano es un descendiente del español medio, por lo que algunos de los rasgos arcaizantes que se mantuvieron dialectalmente en español (matenimiento de /h/ aspirada, etc), en general están ausentes en el español de América, aunque también están ausentes en el español general de España hablado actualmente.
No existe ninguna característica específica definitoria del español de América. Algunas características presentes en todas las variedades de América (ausencia de diferenciación entre los fonemas /s/ y /θ/) también están presentes en algunos dialectos peninsulares. De hecho el español americano es una abstracción que comprende un conjunto de variedades que son diferentes tanto a nivel léxico y fonológico que difieren entre distintos países donde se habla español. Si bien, existen características generales, que la mayoría o todos los hispanohablantes americanos comparten. Algunas características ampliamente compartidas por las diferentes variedades americanas se detallan a continuación.
Seseo El seseo es el fenómeno más representativo del español americano, al igual que en algunas regiones del sur de España (Andalucía y Canarias), por el cual los fonemas representados por las grafías "c" (ante "e" o "i"), "z" y "s" se vuelven equivalentes, asimilándose a la consonante fricativa alveolar sorda /s/, en contraposición al ceceo que se emplea en algunas variantes del sur de España en Andalucía, cuyas "c" y "z" suenan del mismo modo que la "th" inglesa y a la distinción entre /s/ y la consonante fricativa dental sorda /θ/ que ocurre en el centro y norte de España.
Yeísmo
La mayoría de hablantes de español americano utilizan variedades que presentan yeísmo, bajo el cual la pronunciación de la ll es idéntica a la de la y cuando esta última se pronuncia como consonante, aunque su sonido sea tradicionalmente considerado un fonema lateral palatal. En el español rioplatense el yeísmo se presenta con rehilamiento.
Una excepción notable al yeísmo generalizado de América es la zona andina, donde el español estuvo sometido a la influencia de lenguas como el quechua o el aimara que también poseían una lateral palatal /ʎ/. En esa región el yeísmo mayoritariamente no prosperó.
Uso del pronombre “ustedes” El plural de “usted” ("ustedes") cumple en el español americano la función de segunda persona del plural, en completa sustitución de "vosotros", que sólo se usa en España, salvo en partes de Andalucía y Canarias, así como Guinea Ecuatorial en el trato cotidiano con conjugaciones clásicas del voseo (vosotros), reservando "ustedes" para el tratamiento respetuoso.
Voseo
Otra característica presente en América, aunque minoritaria es el voseo. En algunas variantes del español americano se emplea la forma vos para el pronombre de segunda persona singular en lugar del tú. El voseo es mayoritario en el español rioplatense y convive con mayor o menor fuerza con el tuteo en el español chileno, andino y centroamericano; en tanto que es minoritario o inexistente en el español de Perú, México y Caribe. Otro ejemplo puede ser encontrado en los departamentos de Antioquia.
Español amazónico
1. Introducción
El idioma Español, también llamado Castellano, igual que el Portugués, Catalán, Gallego y Provenzal, Frances, Italiano y Retorromano, se originan a partir de la transformación del Latín. Las diferentes lenguas nativas que se hablaban en la península Ibérica, antes de la prolongada dominación romana; a excepción del Vascuence, desaparecieron dejando solo algunos vestigios aislados y voces toponímicas. Para entonces un latín vulgar con características dialectales, remplazó lo que al postre existía en la provincia romana de Hispania.
En el S XI las que prueban sus características típicas castellanas naturales de la típica Castilla la Vieja al sur de la antigua Cantabria. La nueva Lengua para entonces evoluciona según el sino de una misión imperial a partir del momento en que Castilla se eleva a Reino Poderoso y se consolida como la bandera de la Unidad Hispánica.
Elementos básicos en el desarrollo idiomático hacia los Siglos IX y X, fueron los Glosarios (Emilianense y Silense), tipos de diccionarios latinos primitivos donde al lado de las palabras latinas se escribían las Romances correspondientes. En el siglo XI el idioma ya expresaba claramente la Épica de los Cantares de Gesta y con esto se destacaba el primer ícono de la Literatura española: El Cantar del Mio Cid, obra concluida finalmente hacia el S XII. Hacia el S XIII se incorporan expresiones de otras lenguas, se aplica como instrumento en la expresión científica-histórica y se da un gran paso al fijar la Prosa Castellana. La Gran influencia de la Francia y su protagonismo, generan la obligada inclusión de Galicismos dentro del léxico. La incorporación de expresiones populares, y las variantes de cultismo poético, así como los neologismos a partir del latín o el griego; enriquecieron notoriamente la lengua española.
Al Final del S. XV y todo S. XVI surge el período llamado de Grado máximo de Universalidad del idioma, pues en el reinado de los llamados Reyes Católicos, España se unifica como estado y exporta su Lengua Castellana América. El Filólogo Nebrija en 1492 publica la Gramática Castellana dando un destacado impulso al español uniéndolo entonces al latín renacentista. Al amanecer del S.XVII (1605), don Miguel de Cervantes Saavedra, con la obra máxima de la Prosa española: El Quijote de la Mancha, dará muestra del ejemplo vivo y
armónico del refranero popular y de la elegancia renacentista heredada de uno de los mejores momentos del desarrollo artístico y cultural. Quevedo con su Conceptismo y Góngora con su Culteranismo hacen gala de la riqueza del lenguaje barroco. En Los Siglos XVI y XVII, el español se consolida, define sus rasgos básicos y se modifica y acomoda la Fonética.
Hacia 1771, Siglo XVIII, La Real Academia de la Lengua publica su Diccionario de Autoridades, obra que reglamenta la Ortografía, la Redacción y las normas de Gramática
Características comunes del español americano El español americano es un descendiente del español medio, por lo que algunos de los rasgos arcaizantes que se mantuvieron dialectalmente en español (matenimiento de /h/ aspirada, etc), en general están ausentes en el español de América, aunque también están ausentes en el español general de España hablado actualmente.
No existe ninguna característica específica definitoria del español de América. Algunas características presentes en todas las variedades de América (ausencia de diferenciación entre los fonemas /s/ y /θ/) también están presentes en algunos dialectos peninsulares. De hecho el español americano es una abstracción que comprende un conjunto de variedades que son diferentes tanto a nivel léxico y fonológico que difieren entre distintos países donde se habla español. Si bien, existen características generales, que la mayoría o todos los hispanohablantes americanos comparten. Algunas características ampliamente compartidas por las diferentes variedades americanas se detallan a continuación.
Seseo El seseo es el fenómeno más representativo del español americano, al igual que en algunas regiones del sur de España (Andalucía y Canarias), por el cual los fonemas representados por las grafías "c" (ante "e" o "i"), "z" y "s" se vuelven equivalentes, asimilándose a la consonante fricativa alveolar sorda /s/, en contraposición al ceceo que se emplea en algunas variantes del sur de España en Andalucía, cuyas "c" y "z" suenan del mismo modo que la "th" inglesa y a la distinción entre /s/ y la consonante fricativa dental sorda /θ/ que ocurre en el centro y norte de España.
Yeísmo
La mayoría de hablantes de español americano utilizan variedades que presentan yeísmo, bajo el cual la pronunciación de la ll es idéntica a la de la y cuando esta última se pronuncia como consonante, aunque su sonido sea tradicionalmente considerado un fonema lateral palatal. En el español rioplatense el yeísmo se presenta con rehilamiento.
Una excepción notable al yeísmo generalizado de América es la zona andina, donde el español estuvo sometido a la influencia de lenguas como el quechua o el aimara que también poseían una lateral palatal /ʎ/. En esa región el yeísmo mayoritariamente no prosperó.
Uso del pronombre “ustedes” El plural de “usted” ("ustedes") cumple en el español americano la función de segunda persona del plural, en completa sustitución de "vosotros", que sólo se usa en España, salvo en partes de Andalucía y Canarias, así como Guinea Ecuatorial en el trato cotidiano con conjugaciones clásicas del voseo (vosotros), reservando "ustedes" para el tratamiento respetuoso.
Voseo
Otra característica presente en América, aunque minoritaria es el voseo. En algunas variantes del español americano se emplea la forma vos para el pronombre de segunda persona singular en lugar del tú. El voseo es mayoritario en el español rioplatense y convive con mayor o menor fuerza con el tuteo en el español chileno, andino y centroamericano; en tanto que es minoritario o inexistente en el español de Perú, México y Caribe. Otro ejemplo puede ser encontrado en los departamentos de Antioquia.
El español en América
El español en el mundo: el español en América
El
español tiene actualmente una situación privilegiada en el panorama mundial y,
además, sigue en expansión.
Es
la tercera lengua más hablada del mundo, con más de 300 millones de hablantes,
después del inglés y el chino. A su vez, es la segunda lengua internacional,
después del inglés, pues es lengua oficial en 21 países y en organismos como la
ONU, la UNESCO y la UE.
Los
factores económicos, políticos y sociales hacen al español una lengua abierta,
pero al mismo tiempo muy uniforme.
El español en América
La
lengua española llegó a América en 1492, con el Descubrimiento de América. Esta
lengua pertenecía a una comunidad de hablantes muy pequeña, pero pronto se fue
difundiendo hasta llegar a ocupar una gran extensión geográfica: desde el norte
de Estados Unidos hasta la Antártida.
Existen
varios factores que ayudaron a la expansión del español por el
territorio americano y a la configuración de unos rasgos lingüísticos
determinados:
·
El proceso de
colonización. Los emigrantes fueron llegando en oleadas y, a su vez, fueron
formando una sociedad colonial que mantuvo unas peculiaridades lingüísticas
específicas.
·
La procedencia
social y regional de los colonizadores. Estos tenían un origen social muy
variado, pero geográficamente procedían mayoritariamente del suroeste
peninsular (Andalucía, Extremadura …) y de Canarias.
·
El contacto con
las lenguas indígenas. Existen muchas lenguas indígenas de gran importancia en
territorio americano, como el quechua, el guaraní, el náhuatl, el aimara, el
mapuche o el arahucana.
Hasta
el siglo XVIII, los religiosos predicaron en las lenguas indígenas americanas y
el español era tan solo una lengua de minorías. A partir del siglo XIX, con la
independencia de las repúblicas americanas, los nativos americanos vieron el
español como una manera de promoción social, convirtiéndola así en la lengua de
uso general en todo el continente.
Dialectos del español en América
Como
hemos visto anteriormente, existen distintos factores que influyeron en el
desarrollo y la expansión del español por el continente americano. La
diversidad de estos factores produjo la evolución de distintos dialectos. Por
tanto, aunque hablemos de un “español de América” en general, no debemos
olvidar que existen distintas variedades geográficas de dicho español.
No
entraremos en enumerar y describir cada uno de estos dialectos, pero
señalaremos dos zonificaciones principales:
·
los dialectos de
las zonas caribeñas, que son innovadores, influidos por las variedades canaria
y andaluza
·
y los dialectos de
México y Perú, más conservadores.
Características comunes del español
americano
El español americano es un
descendiente del español medio, por
lo que algunos de los rasgos arcaizantes que se mantuvieron dialectalmente en
español (matenimiento de /h/ aspirada, etc), en general están ausentes en el
español de América, aunque también están ausentes en el español general de
España hablado actualmente.
No existe ninguna característica
específica definitoria del español de América. Algunas características presentes
en todas las variedades de América (ausencia de diferenciación entre los
fonemas /s/ y /θ/) también están presentes en algunos dialectos peninsulares.
De hecho el español americano es una abstracción que comprende un conjunto de
variedades que son diferentes tanto a nivel léxico y fonológico que difieren
entre distintos países donde se habla español. Si bien, existen características
generales, que la mayoría o todos los hispanohablantes americanos comparten.
Algunas características ampliamente compartidas por las diferentes variedades
americanas se detallan a continuación.
Seseo
El seseo es
el fenómeno más representativo del español americano, al igual que en algunas
regiones del sur de España(Andalucía y Canarias), por el cual los fonemas
representados por las grafías "c" (ante "e" o
"i"), "z" y "s" se vuelven equivalentes,
asimilándose a la consonante fricativa alveolar sorda /s/, en contraposición al ceceo que
se emplea en algunas variantes del sur de España en Andalucía, cuyas
"c" y "z" suenan del mismo modo que la "th"
inglesa y a la distinción entre /s/ y la consonante fricativa dental sorda /θ/
que ocurre en el centro y norte de España.
Yeísmo
La mayoría de hablantes de español
americano utilizan variedades que presentan yeísmo, bajo el cual la pronunciación de la ll es
idéntica a la de la y cuando esta última se pronuncia como
consonante, aunque su sonido sea tradicionalmente considerado un fonema lateral
palatal. En el español rioplatense el yeísmo se presenta con rehilamiento.
Una excepción notable al yeísmo
generalizado de América es la zona andina, donde el español estuvo sometido a
la influencia de lenguas como el quechua o el aimara que también poseían una
lateral palatal /ʎ/. En esa región el yeísmo mayoritariamente no prosperó.
Uso del pronombre
“ustedes
El plural de “usted”
("ustedes") cumple en el español americano la función de segunda
persona del plural, en completa sustitución de "vosotros", que sólo
se usa en España, salvo en partes de Andalucía y Canarias, así como Guinea Ecuatorialen el trato cotidiano con
conjugaciones clásicas del voseo (vos+otros), reservando "ustedes"
para el tratamiento respetuoso.
Voseo[
Otra característica presente en
América, aunque minoritaria es el voseo. En algunas variantes del español americano
se emplea la forma vos para el pronombre de segunda persona
singular en lugar del tú. El voseo es
mayoritario en el español rioplatense y convive con mayor o menor fuerza con el tuteo en
el español chileno, andino y centroamericano; en tanto que es minoritario o
inexistente en el español de Perú, México y Caribe. Otro ejemplo puede ser encontrado
en los departamentos de Antioquia, Valle del Cauca y Norte de Santander
(Ocaña) en Colombia, y el estado Zulia en Venezuela, donde el voseo es predominante.
Dialectos del español Americano
Español amazónico
El español amazónico, o también español de la selva, es un
variedad del idioma español hablado en la Amazonia. Influenciadas por las lenguas amazónicas, está
especialmente en los departamentos de la Amazonia peruana como Loreto y Ucayali. El español
amazónico es también hablado en algunas áreas de Brasil adjuntas a Loreto y Ucayali, en el departamento
de Amazonas de
Colombia, y en los estados bolivar y amazonas de Venezuela.2 1 3 También tiene sub-variadades como el acento de Iquitos hablada
en Ciudad de Iquitos.
El español
andino
Es un dialecto del idioma español hablado en los Andescentrales, desde el suroccidente de Venezuela, pasando por Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia, hasta el Norte argentino y la puna de Chile. Tiene influencias mayormente del castellano
clásico, que es favorecido más en las ciudades, mientras que en las áreas
rurales y parte de las ciudades, existe influencia del quechua, del aimara y de otras lenguas autóctonas.
El español
caribeño
Es un conjunto de variedades diatópicas de la lengua española1 predominante
en las Antillas mayores y la Cuenca del Caribe. Se habla en los territorios isleños de Cuba,
la República Dominicana, Puerto Rico, y en territorios continentales de Colombia, Venezuela y Panamá, así como en territorios de Florida en Estados Unidos.
Cabe señalar que esta variante del idioma
español en Colombia, solo es hablada en la Región Caribe, y no en el
resto del territorio de ese país.
Se reconoce por la notable influencia los
dialectos canario y andaluz(por el contacto histórico entre los puertos2 ), la
gran influencia gallega, asturiana, africana y las palabras del taíno y del portugués, y en Venezuela por la
influencia del italiano y del inglés; también es el que más se oye en Miami y Nueva York (Estados Unidos) y el empleado por los cantantes de salsa, merengue y reguetón.
El español
centroamericano
comprende un conjunto de variantes diferentes del idioma español empleado
en las repúblicas centroamericanas de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, y Costa Rica, junto con el estado sureño mexicano de Chiapas.1 En
muchos casos, las variedades de español centroamericano presentan rasgos
intermedios entre las variantes conservadoras (llamadas a veces "de las
tierras altas") y radicales del continente (llamadas a veces "de las
tierras bajas"). El principal punto de cohesión común del español hablado
en Centroamérica es el voseo.
El español panameño no se clasifica usalmente como una
variante de español centroamericano, sino como una subvariante del español caribeño).
Castellano chileno o dialecto
chileno4 es una variante del español propia de dicho país, que presenta
ciertas diferencias a lo largo de su área de distribución
geográfica y entre las
distintas clases
sociales[cita requerida]. El español
es el idioma
oficial de facto y la lengua administrativa de Chile,n 1 donde también recibe el nombre de
«castellano»,5 y hablado por el 99,3 % de los
chilenos6 —los otros dialectos del castellano
que se hablan en el territorio chileno, aunque en menor medida, son el español
andino y el español chilote—.7 El español de Chile suele considerarse
una unidad independiente en los estudios para establecer las zonas dialectales
americanas.1 8
Pese
a que en el ámbito doméstico se registran simultáneamente casi todas las
particularidades que se describen más adelante, en situaciones formales las
diferencias con el español estándar son menores y suelen restringirse a la
pronunciación y al léxico.
En
zonas limítrofes de Argentina con Chile, se puede escuchar a los
habitantes expresarse hablando con una pronunciación y entonación similares a
las del español chileno y utilizando algunas palabras de él; sin embargo, pese
a las semejanzas, el uso del idioma, gran parte del léxico y las estructuras
utilizadas corresponden totalmente al español rioplatense. Esta situación se registraprincipalmente
en la región geográfica argentina de Cuyo, particularmente en
la ciudad de Mendoza,
mientras que en la Patagonia
chilena se mezclan
rasgos chilenos con otros chilotes y rioplatenses.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)